miércoles, 29 de abril de 2009

inventario de lo que hay

anaquel con pared de vidrio,
disco infantil, libro de relatos
librero largo hecho en roble,
lomo-grueso, lomo-rojo, lomo-comoazulderayas.
y un monitor encendido, y un reflejo triste a raz.

un escritorio, pulido a manodura, a manodepadre
de marrón mojado, de callo sangrado, y un ponchador,
y otro ponchador, y el rectángulo oscuro de tinta vieja
que mi padre utilizaba en sus recibos, dos lápices de pintar,
rojo y casi-rojo, dos tarjetas en blanco, una libreta
que más quiere que es, un teléfono celular sin contrato,
un teclado manchado, dos manos que flotan,
que quieren decir lápiz o libros o voluntad,
pero que gritan martillosclavoslijasysierrasdecortar
y un monitor encendido, y un reflejo triste a raz.

dos sortijas gastadas, un espejo al fondo de la habitación,
una grieta su centro, poco de moho en extremos nortesur,
techo estocado, pared amedrada, abanico sin nombre
luz de halógeno, luz de ventana, ventana miami,
campo-afuera, campo-adentro, quenepo y guamá
y mi padre, que se asoma por la ventana, y me observa en silencio, serio, solemne, frente al monitor encendido, frente al reflejo triste, que me observa arrepentido sintiéndose otra vez, me lo ha comentado antes, como una cadena pesada que no me permite escapar.

unas palabras, una mentira, y la sonrisa de vencido.

lunes, 27 de abril de 2009

chica taurina
y sus uñas de ambar
la forma en la que rebobina
los mayos corridos a corridas
dice no corro huyo
huyo tan rápido
que no me ves.

la caza es el obstáculo
y no el sabor en la lengua
es la espera, es el morbo,
es el tiempo y las palabras
que murieron pa llegar hasta aquí
dice como enumerando sin dejarse el pelo quieto.

chica taurina
y la seda de sus excusas de las
vueltas linguísticas con las que evita
el después con las que deslumbra
al niño des aparecido des
hecho ante la posibilidá de que
se llegue a acercar
llegue a cercar toro tauro taurina
al dulce sonido de sus ojos
dulce mirar de sus verbos.

ven vendaval ven niño sin hacer
popa al sur y tendencia al oeste
popa al sur y tendencia al o este
canta como embrujada sin dejarse el pelo quieto.

chica taurina
la caza es el obstáculo
chica taurina
ven vendaval

viernes, 26 de diciembre de 2008

funeral de a uno

ruralia en traje de chango fúnebre
un poco más negro, un poco más formal.
ruralia en zapatos de punta, taco a medio cercenar,
suele caminar como de-antes, como de campo-amargo.
ruralia sin maquillar, lágrima pesada sobre mejilla
gravitas la evade y no cae; te digo, no cae.
ruralia de hombros pesados, de claro en mal-tiempo
ruralia tristonga, de alma-partida, de arbol-caído
de mal-tiempo, imagen repetida, de mal tiempo, línea repetida
ruralia hecha-cantoj, ruralia hecha añicos,
ruralia dándole la espalda que nunca le da a su enemigo
porque yumbra yace muerta, dice la carta y nadie lo entiende,
yumbra yace muerta y ruralia busca en la vecindad del cadáver
una paño de lágrimas
yumbra yace muerta, grita, pero nadie (¿por qué le sorprende?) la entiende.

jueves, 25 de diciembre de 2008

no des a urbe tus sequías

ruralia de campo amargo a ti te llama el arbol
niña de tierra mía a ti te llama el pasado

la niña de campo-amargo se deshace en sal y llanto,
hojas secas y tierra baldía;
no la niña de mi-adentro que se deshace por Ruritania
(la otra, la caribeña, la icónica playera)

ruralia de campo amargo a ti te llama el arbol
niña de tierra mía a ti te llama el pasado

tu recuerdo se hará de sobras y basura si abandonas tu diván
pa' tomar la moneda concreta, pa' bailar lo que canta urbe:
ventana miami, mal-de-moho, hay algo ahí, mi niña
por donde sólo miran los padres de los hombres


[este poema es, por un lado, homenaje a un poema de Samuel Lugo ("no des al mar tus limoneros"), poeta lareño que supongo que está muerto y que a mi padre le encantaba.]

campo-solo

ruralia tantas veces está sola.
a ras de la arboleda
la moneda concreta embruja;
hojarasca-abajo estruja
la isla-caspa, fénix de mar.

la canción de urbe que quema
necesidades de periferias
(ausentes, claro).

tallos de quéhaceres
que se marcan deadentro
en el vientre, a-punta,
en el muslo, a-punta.

y ruralia solitaria
olvidada y denegada
y ruralia solitaria
olvidada y denegada
y ruralia olvidada
denegada y solitaria

ruralia tantas veces está sola.
obligada a margen de proyectos,
la promesa concreta embruja
calle-abajo aprieta
el país-villano, gólem-fracaso.

inventario de lo que dejaste

envase de perfume azul
tapa plateada, un poco inclinada
envase cuadrado de perfume azul
superpuesto a pared gris
vidrio delgado, también curveado
iluminados por bombilla amarilla de 85watts
distorción esférica
envase cuadrado de perfume azul
reflejo redondo un poco torcido
ventana miami de tono gris
computadora portatil de viejo grosor
libreta tachada mal usada
fotografía 4x5 de pareja de invierno
tachuela sobrante en sombra de envase
envase cuadrado de perfume azul
envoltura de regalo jamás usada
tarjeta 2x3 a medio escribir:
te amo, mi chuka, feliz nav...

miércoles, 24 de diciembre de 2008

fluir

niña que va caminando mira a ambos lados antes de cruzar la calle que más abajo la luz ha cambiado y la manada se dirige hacia tí con trompas afiladas y miradas de navaja, lo que quieren es privarte de todo eso, te lo repito, lo que quieren es privarte de todo eso, así que por favor mira a ambos lados, no, no me cuestiones, mira a ambos lados, tres veces se repiten las cosas en todos los cuentos de hadas, tres veces te lo repito, que la luz ha cambiado, que las cosas ya no serán iguales si no me haces caso, que los lobos se vestirán de abuelas y las caperuncitas cubrirán a todos los extraños, cuidado niña, amárrate los cordones de los zapatos, no vaya ser, no vaya a ser, no vaya hacer, no vaya. niña, niña, mi niña.

nave

dígame, pues, qué deletrea el ala
de la nave de combate que traza
como bala, los contornos de
las guerras pasadas y
de las estrellas más distantes

domingo, 9 de noviembre de 2008

no mismo

La mujer en la pantalla
y sus lentes de aluminio
sustituyen muchas veces
el hombre en la cama.

No se lo digas que duele,
las alas no siempre
se componen de plumas.

Es fácil tornar el lado
cuando es ya un cardenal
rendido y torcido
por esas miradas

La mujer en la pantalla
y sus trajes rojizos
muchas veces sustituyen
sus labios postizos

No se lo digas lo matas
Las alas no siempre
se forman de plumas
sucede que las mías
son de navajas.

viernes, 7 de noviembre de 2008

excusas

el olvido de este lugar,
a veces,
no es más que
ganas de no salir a
podar el pastisal
cuándo el sol tan alto prende.